30.3.07

Premios Darwin

Los individuos que protegen nuestro patrimonio genético a través del sacrificio máximo; eliminándose a sí mismos de modos extraordinariamente idiotas, mejorando por lo tanto las posibilidades de la raza humana para sobrevivir a largo plazo. Cuentos morales acerca de gente que se ha matado a sí misma de las maneras más estúpidas, y, al hacerlo, han mejorado significativamente el patrimonio genético, eliminando sus propios genes del proceso evolutivo.

Si a ésto le sumamos, la célebre frase de Albert Einstein:

Sólo dos cosas son infinitas,
el universo y la estupidez humana,
y de lo primero no estoy seguro.


Nos sale una masa de especímenes premiados desde 1993 por la profesora Wendy Northcutt, bióloga molecular de la Universidad de Standford.

Las reglas para jugar son claras, y se resumen en 5:

Reproducción:
El candidato debe terminar su experiencia muerto, estéril o incapaz de reproducirse de cualquier modo.

Excelencia:
El candidato debe haber manifestado una inconcebible incapacidad de juicio.

Autoselección natural:
El candidato debe ser causante de su propia muerte.

Capacidad de juicio:
El candidato debe ser capaz de un juicio maduro y preciso.

Veracidad:
El evento en cuestión debe poder ser comprobado.

Y un ejemplo para abrirnos el "apetito"...
Un especimen fue el misterio dueño de un Chevy Impala propulsado a chorro. La Patrulla de Carreteras de Arizona (EEUU) tropezó con un montón de metal derretido empotrado en la ladera de un precipicio junto a una curva de la carretera. Los restos se parecían a los de un accidente aéreo, pero tenían aspecto de automóvil y no se había informado de ningún accidente aéreo en la zona.

Un laboratorio reconstruyó la historia. Parece ser que el conductor había conseguido de alguna manera una unidad JATO (Jet Assisted Take Off, un cohete de combustible sólido) que se utiliza para dar un "empuje" extra a los aviones militares de transporte pesado para despegar desde aeródromos cortos.

Condujo su Chevy Impala al interior del desierto y encontró un largo tramo recto. Entonces enganchó la unidad JATO a su coche, entró dentro, cogió velocidad y encendió el dispositivo de motor a reacción. Los policías estimaron que el conductor del coche encendió el cohete a una distancia de 3 millas (5 km.), aproximadamente, del lugar del choque. Allí, el asfalto estaba quemado y derretido.

Alcanzó el empuje máximo en menos de 5 segundos, con lo que el Chevy alcanzó velocidades de más de 350 mph (560 km./h.) y continuó a máximo empuje durante unos 20-25 segundos adicionales, el conductor, que no era piloto, habría experimentado lo más parecido a las fuerzas gravitatorias que normalmente están reservadas a los pilotos de cazas F-14 bajo una post-combustión completa, básicamente le provocó quedar inconsciente durante el resto del suceso.

El individuo siguió sobre la carretera durante aproximadamente 2,5 millas (4 km.) (15-20 segundos) antes de que el conductor aplicara y quemara completamente los frenos, reventara los neumáticos y dejara marcas de goma sobre la superficie de la carretera.

Llegó a volar durante otras 1,4 millas (2,3 km.), impactando en la ladera del precipicio a una altura de 125 pies (40 m.), dejando un cráter negro de tres pies de profundidad en la roca. La mayoría de los restos del conductor no fueron recuperables; no obstante, se extrajeron fragmentos pequeños de hueso, dientes y cabellos del cráter y se quitaron fragmentos de una uña en un trozo de escombros que parecía ser un trozo del volante.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

estoy abierto a sugerencias :p

Gabry (Erfror) dijo...

ke talegon no?! jajaja

creo ke no se murio...

Dr. Flasche dijo...

busca más ejemplos ya !

FraN dijo...

sip... pq los hay y muy buenos, pondré los premios de este año :P